Volando desde Buenos Aires a las islas Galápagos con LATAM (cambios de avión, equipaje)

Hace un tiempo atrás, canjeé millas LATAM Pass por un vuelo a las islas Galápagos (Ecuador). En este post les contábamos sobre eso: Emitimos un vuelo a Galápagos, culpa de tener un blog de viajes. Sinceramente, cuando lo emití, miré muy por arriba el tema de los horarios y conexiones, así que cuando se empezó a acercar marzo me encontré con que salía casi a las cuatro de la mañana desde Ezeiza y tenía que hacer tres tramos de avión.

El primer vuelo se anunciaba a Lima y Quito por igual, ya que hacía una escala en la ciudad peruana, pero su destino final era en Ecuador. Yo hice el check in online de todos los vuelos un día antes de volar y en el aeropuerto de Ezeiza solamente despaché de equipaje (finalmente fue una carry on de 9 kilos). Ya que estaba en el mostrador, le pregunté a la chica si de casualidad le quedaba algún asiento en fila de emergencia y me dijo que sí para el viaje hasta Quito. ¡Genial!

El embarque estaba anunciado unos 50 minutos antes del vuelo y fue puntual. Se organizó por grupos, dejando primero pasar a pasajeros con necesidades especiales y status.

El avión A319 estaba limpio y en buenas condiciones, contaba con dos filas de tres asientos cada una en Economy. Especialmente en la fila 10, estábamos todos bastante cómodos:

Despegamos en horario, hicieron algunos anuncios y me dormí unas tres horas, sin pausa, enrollada en la manta y la almohada. Venía agotada, como explica este post: ¿Ustedes también llegan así cuando van a iniciar un viaje?).

A eso de las 7:15 hs., empezó a pasar el personal de a bordo con los carritos. Era el desayuno y superó mis expectativas. Para empezar, debajo de la servilleta de la foto había cubiertos reales, detalle que no se ve mucho en otras aerolíneas.

El servicio incluía un sándwich «gourmet» de jamón y queso que me resultó sabroso, galletitas para untar con mermelada y manteca y una porción de frutas frescas. Acá los gajos cítricos y el ananá con el tenedor «de verdad»:


Un dato: Mi vecina de asiento era celíaca y me dijo que su menú era muy bueno, estaba contenta porque tenía frutas y un sándwich de pollo hecho con unas galletas de arroz.

Cerca de las 8:30 de la mañana aterrizamos en Lima, unos 20 minutos antes de lo esperado. Aunque volvería a subir al mismo avión dos horas después, tuve que bajar y hacer el control de seguridad que me llevó unos 15 minutos.

Pasadas las horas, volví al mismo A319 que se encontraba en iguales condiciones que en Ezeiza, pero con la diferencia de que en este vuelo no entregaban manta ni almohada.

Como estaba un poco menos cansada, probé el sistema de entretenimiento a través de la app. Unos minutos antes de despegar, aproveché el plan América de claro y descargué LATAM Entertainment. La verdad es que arranqué una peli y me dormí (al final sí estaba cansada). La oferta cinematográfica me resultó interesante, no así la de música que era bastante básica, y estaba muy bueno ir viendo los detalles del vuelo.

Unos 40 minutos antes de aterrizar, nos trajeron un coffee break que consistía en un muffin decente con bebida a elegir.

Al llegar al aeropuerto internacional Mariscal Sucre de Quito (Ecuador), tuve que hacer migraciones, retirar mi valija y subir al segundo piso para hacer un par de controles específicos de ingreso a las islas. Luego explicaré esto en detalle, pero, por ahora, vale decir que tuve que pasar por una revisión de equipaje y volver a despachar la valija.

El último vuelo (por fin) iba desde Quito hasta el aeropuerto de Baltra. Tardó un poquito más de dos horas y, a diferencia de los otros, no contaba con servicio de comida o snacks incluidos, sino que había un menú del «Mercado LATAM» para comer o tomar algo a la carta.

Por ejemplo, unas papas fritas Lay’s estaban U$S 1,50 y un sandwich de jamón y queso arrancaba en U$S 6. Yo no tenía hambre, así que no probé nada.

El vuelo fue tranquilo, con poca turbulencia, y nos regaló lindas vistas del mar, las islas y las montañas.

Llegamos puntualmente al aeropuerto ecológico Seymour de Baltra y las valijas nos estaban esperando en la cinta después de hacer los trámites de ingreso.

En mi experiencia, LATAM fue puntual, brindó un buen servicio y no tuvo ninguna dificultad con el equipaje. El personal me pareció cordial, respetuoso y preciso al momento de dar instrucciones respecto a las conexiones, despacho de valijas y demás temas relevantes.

Cuando llegué a las islas, me hice unos amigos que también vinieron de Buenos Aires con la aerolínea y me contaron que tuvieron algunas demoras, frente a las cuales LATAM se hizo cargo de transportarlos a un hotel cinco estrellas con todas las comidas incluidas y reacomodarlos en los vuelos más cercanos en horario. Aunque sufrieron retrasos, no tenían quejas sobre el accionar de la compañía. Vamos a ver qué me toca a mí a la vuelta.

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14 Respuestas

  1. Guillermo dice:

    Que bueno llegar bien y sin contratiempos Cintia, a disfrutar y postearrrrrrr…

  2. Starla dice:

    Qué bueno es cuando se viaja asi, de acuerdo a lo establecido y todo resulta tranquilo. Yo además voto por el desayuno de la tercera foto, es la combinación que me gusta, aunque no está en todas las aerolíneas. Sobre los cubiertos, no me tocó en Latam, pero en Iberia si, que también da cubiertos de «verdad». Esas cosas hoy en dia sorprenden, jaja.

    • Cintia C. dice:

      Jaja, sí, es raro el tema de los cubiertos. Lindo ese desayuno, la verdad. Saludos, starla.

    • Nestor dice:

      Justo estaba pensando lo mismo!!! No como huevos a la mañana y mucho menos en el avion. Voy a viajar a Miami en el directo ida y vuelta de Latam, y viendo las fotos de los nuevos menues prefiero los tradicionales. El desayuno ideal para mi es cambiando el sandwich por una medialuna!

  3. adrián dice:

    Muy buena info, Cintia. La leí con todas las antenas paradas, ya que prácticamente voy sobre tus huellas…

    Está buenísimo que una genia viajera como vos vaya tirando estos tips para este viaje no habitual que es de las Islas Galápagos.

    Completísima nota, espero ansioso los siguientes post…

  4. Carolina dice:

    Hola Cintia! qué bueno que todo haya salido bien, en tiempo y forma. Te agradezco la info, hasta el más mínimo detalle ayuda!
    Yo soy de los que esperaba este post, demás está decir que espero los próximos!
    Besos!
    Caro

  5. Mauricio Andermatten dice:

    Un 10 el post,segui asi Cintia.Me interesa,me interesaaaaaa 🙂 Saludos

  6. Lola Rodriguez dice:

    Tambien viaje barbaro pero tuve mucha espera entre vuelo y vuelo con Latam

  7. Eugenio dice:

    Hola Cintia! Estoy viajando a Ecuador con escala en Santiago y a la vuelta escala en Lima, cómo accedo a las salas de espera VIP? algún otro beneficio en aeropuertos? Gracias Genia!!

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