Forzándonos a cumplir con nuestra «obligación de viajeros»
Hace algunos años visité México por primera vez. Disponíamos sólo de uno pocos días así que decidimos concentrarnos en dos destinos, uno de ellos sería la Ciudad de México, ya que llegábamos y regresábamos desde allí. Averiguamos sobre los vuelos entre el DF y el aeropuerto de Cancún y nos resultaron muy baratos, de modo que quedó definido el segundo destino: la hermosa Riviera Maya. El espíritu de ese viaje no sería...